Si hubiera que elegir un coche realmente mítico en la historia de Toyota, muchos no tardarían en nombrar al Supra. ¡Y con razón!. El Supra es uno de los grandes deportivos japoneses de todos los tiempos, un mito entre los fanáticos de los coches japoneses. Sin embargo, desde nuestro punto de vista, sería quedarnos en la superficie. Toyota tiene en su historia otro modelo que, a día de hoy, es un objeto de deseo por los coleccionistas, mucho más de lo que puede llegar a ser un Supra, el Toyota 2000GT.
En la década de los 60, la firma japonesa se atrevió a poner en circulación lo que ningún otro fabricante nipón se había atrevido, creando así el primer superdeportivo japonés de la historia. Un coupé de diseño puramente clásico, con un morro muy largo y una cabina casi sobre el eje trasero, que escondía un propulsor especialmente avanzado para su época, allá por los 60. Era un 2.0 atmosférico capaz de rendir 150 CV, que contó con la colaboración de Yamaha (procedía del Toyota Crown, pero Yamaha lo revisó y modificó).
Curiosamente, fue Yamaha quien inició el proyecto de este deportivo, que acabó en manos de Toyota tras ser rechazado por Nissan. No son pocos los que comparan este coche con el actual GR Supra, ya que ninguno de los dos son coches puramente Toyota…
¿Una réplica del Toyota 2000GT?, ¡sí, por favor!
Toyota fabricó muy pocas unidades del 2000GT, alrededor de 350 coches, así que resulta muy exclusivo, y cuando una unidad sale a la venta, su precio es estratosférico, tanto, que pueden llegar a superar el medio millón de euros. Es evidente que no todo el mundo puede tener uno en su casa, al menos uno original, porque si te puedes “conformar” con una réplica, estás de suerte.
Una empresa japonesa llamada Rocky Auto, está desarrollando una réplica del Toyota 2000GT, la primera réplica del mundo de este modelo japonés. Es bastante común encontrar réplicas del Cobra, del Ford GT40, de Lotus, de Ferrari… pero el 2000GT no había sido todavía un coche que llamara la atención en este peculiar mercado. Lo mejor de todo es que, además, el proyecto cuenta con la participación de Hiroshi Hosoya, quien participó en el primer Gran Premio de Japón en 1963 y luego se convirtió en piloto profesional de Toyota, participando en el desarrollo del 2000GT original.
El Toyota 2000GT fue un coupé de diseño puramente clásico, con un morro muy largo y una cabina casi sobre el eje trasero
No obstante, no se llamará Toyota 2000GT, es una denominación registrada y como cabe esperar, no está disponible. El resultado final del proyecto será el Toyota 3000GT y esconde algunas curiosidades que gustarán a los fanáticos de la marca, aunque otras no tanto.
Configura tu Toyota 3000GT a la carta
Hay muchas cosas que no se han publicado del 3000GT, de la réplica de uno de los Toyota más especiales de la historia, pero sí conocemos algunos detalles que son bastante llamativos. Por ejemplo, el coche no tendrá las mismas dimensiones, los motores elegidos y ciertos detalles, como las suspensiones o las características del interior, no permiten mantener su pequeño tamaño. Aun así, toda la estética será casi calcada, al igual que el habitáculo. La única diferencia es que no tendrá freno de estacionamiento por palanca, sino por pedal y el selector del cambio manual desaparece.
No hay cambio manual, porque Rocky Auto ha optado por montar un cambio automático de cuatro relaciones, una opción poco acertada para un coche pensado para disfrutar al volante. Además, bajo el capó tendrá un motor de seis cilindros 3.0, un motor que todo el mundo conoce, pero en esta ocasión, en su versión atmosférica. Hablamos del 2JZ del Supra A80, que puede ser cambiado nada menos que por el grupo propulsor del Toyota Prius.
Efectivamente, Rocky Auto también ha pensado en mantener la esencia actual de la marca, ofreciendo una versión híbrida de su réplica del Toyota 2000GT, aunque no ha facilitado información de cómo se realizará el montaje o como ha sido el desarrollo de esta versión híbrida.
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