Mr Bean, uno de los personajes de humor británico más famosos, esconde mucho más que una serie de actuaciones haciendo un poco el tonto. Seguro que muchos os acordareis de aquellas escenas al volante de su mini de color verde lima, con el que siempre acaba provocando algún accidente a un Relian Regal, un aparato de tres ruedas colocadas por poca inteligencia (una rueda delante y dos detrás), pero eso solo ocurre en las películas. Rowan Atkinson, el actor que interpreta a Mr Bean, es un conocido aficionado y coleccionista de coches, que tiene y ha tenido en su haber algunas de las máquinas más especiales.
Una de ellas la puedes ver en las fotos, un Aston Martin V8 Vantage Zagato, fue hace años parte de su colección y gracias a eso, no solo ha ganado en fama y por supuesto en valoración, sino que también ganó en prestaciones y en presencia, pues el propio Rowan lo transformó para poder competir con él. Está considerado como el ejemplar de V8 Vantage Zagato más rápido y potente del mundo.
Por lo general, una de las hazañas más famosas de Rowan, es estrellar nada menos que un McLaren F1 (de color marrón, por cierto), pero se habla poco de su posterior acción, que fue mandar el coche al taller sin reparar en gastos. Pero bueno, el caso es que Mr Bean es mucho más que un personaje que no tiene mucho de inteligente, en realidad es un consumado aficionado al automóvil con la capacidad de permitirse cualquier capricho.
Bajo el capó del Vantage Zagato, el V8 de 5.3 litros también recibió las atenciones de la gente de Aston Martin Works
Entre los conductores normales, es decir, aquellos que no le hacen ni caso al mundo del automóvil, un coche con 10 años es “un coche viejo”, pero en ocasiones los coches son como el buen vino, mejoran con los años. Por eso, hablar de un Aston Martin con 10 años de antigüedad no es hablar de un coche viejo, ni mucho menos. Eso lo sabemos todos los que estamos metidos en este mundillo y, obviamente, lo sabe un tipo como Rowan Atkinson, por eso, a finales de los 90 se compró este V8 Vantage Zagato. Concretamente, se hizo con él en 1998.
Sin embargo, Atkinson tenía planes para este coche, planes muy interesantes. Así que, según llegó a sus manos, lo mandó al taller a darle un repaso completo y hacer de este GT de lujo, un coche de carreras auténtico. Pero no fue un taller cualquiera donde se completó la transformación, fue nada menos que Aston Martin Works.
Actualmente, este Aston Martin V8 Vantage es único en el mundo, tan solo existe esta unidad con su preparación. También es cierto que se fabricaron tan solo 50 unidades del Aston Martin V8 Vantage Zagato y, no se le escapa a nadie, todas fueron a parar a colecciones de donde apenas salen. Son meros objetos de especulación. No obstante, Atkinson compró el V8 Vantage Zagato con la intención de participar en la categoría AMOC C2 Class de Reino Unido.
La transformación fue realmente espectacular. De primeras, se desmontó el coche por completo, se desechó el habitáculo original en pos del ahorro de peso y muchos paneles de la carrocería fueron reemplazados por otros más livianos. Las ventanillas son de metacrilato y se instalaron tanto buckets de competición como refuerzos y sistemas de seguridad obligatorios por reglamento. Suspensiones y frenos fueron igualmente sustituidos. En el primer caso, un conjunto de amortiguadores Koni y muelles Eibach, mientras que los segundos pasaron a estar firmados por AP Racing.
Bajo el capó, el V8 de 5.3 litros también recibió las atenciones de la gente de Aston Martin Works. No fueron muchos los cambios, pero los que se llevaron a cabo permitieron ganar en potencia y, por tanto, en velocidad. Así, los carburadores originales dejaron su lugar a un sistema de inyección Weber Alpha, junto con escapes con recubrimiento de cerámica y la potencia pasó a 482 CV a 7.000 rpm y 558 Nm de par.
Rowan mantuvo el coche por 10 años, durante los cuales, lo usó para correr en diferentes ocasiones. En el año 2001 sufrió un accidente y desde entonces, se retiró de la competición. En el año 2016 fue nuevamente modificado por Nicholas Mee & Co, empresa que lo adaptó para que pudiera rodar nuevamente por vías públicas, aunque conserva todo lo añadido en su primera mutación (paneles de carrocería, motor, jaula…).
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