Sobre las carreteras de Hollywood han rodado coches míticos que han quedado para el recuerdo de todos aquellos aficionados al motor y al cine. El coche fantástico, el DeLorean de Regreso al Futuro, la saga de Fast and Furious, Herbie… pero ninguno como Eleanor.
El vehículo es el protagonista de la película “60 segundos”, en la que Nicolas Cage junto a su banda, a la que pertenece Angelina Jolie, tienen que robar 50 coches en una noche para salvar la vida de su hermano pequeño. El último de éstos, Eleanor.
Los orígenes de Eleanor
A pesar de que es un coche mítico e inigualable, se podría decir que es la versión 3.0. La primera película llamada “60 segundos” se llevó a la gran pantalla en 1974. En el rodaje, el director y actor principal, H.B. Halicki, a bordo de un Ford Mustang Match 1, se fracturó 10 vertebras en un salto con el coche, pero salió caminando por su propio pie. En la secuela, no tendría tanta suerte. En una escena, un poste se desprendió y cayó sobre Halicki, que murió al instante. Tras su muerte, su mujer, Denice Shakarian, se quedó con el coche y con la marca registrada de Eleanor.
El nuevo Eleanor, un Shelby GT 500
Sobre el papel es un Shelby GT 500, pero como casi todo en el cine, es ficción. Steve Stanford y Chip Foose usaron como base un Ford Mustang Fastback del 67 para crear una obra de arte con cuatro ruedas. Sobre la línea original se han implantado grandes cambios. En el capó, procedente de un Shelby, se tapó la toma de aire para dejar una protuberancia, llamativa a la vez que atractiva. En los laterales, tomas de aire que no son funcionales, por lo menos en el modelo original. Los escapes estaban debajo de las puertas, pero en la película eran de pega. Cuando decidieron vender los vehículos, tuvieron que pasar por un taller para readaptarlos. Las llantas son hechas a medida y únicas. En la parte trasera, el final del techo coincide con el inicio de un ligero alerón integrado en la carrocería.
En el interior, todo fue readaptado. Desde los relojes y contadores, pasando por las chapas y asientos hasta la palanca y los botones, que incluían un pulsador para activar el nitro. La bombona de los caballos extra se encontraba en el maletero y, obviamente, tampoco era funcional.
Bajo el capó, un motor Ford V8 Racing de 5,8 litros que rendía 400 CV. A parte de la cilindrada, el vehículo contaba con una caja de cambios de cuatro velocidades, con suspensiones hechas a medida, frenos de competición y neumáticos a la altura de la potencia. En comparación con la versión original, el de la película iba más pegado al suelo.
Los “hero cars”
De los 11 coches fabricados para “60 segundos”, solo tres eran funcionales. El resto de vehículos fueron destruidos durante el rodaje y no eran piezas completas como los denominados “hero cars”. Uno de esos se vendió por más de un millón de euros y, desde 2017, pertenece a una empresa alemana llamada Chrome Cars. Es el 7/11 y su número de chasis el 7R02C173895.
“Nuestra ‘Eleanor’ es uno de los tres ‘hero cars’ supervivientes que jugaron un papel importante en la película. Los ‘hero cars’ son vehículos cinematográficos totalmente funcionales en los que también se podía ver en primer plano a los principales actores de la película. Originalmente, se fabricaron once vehículos cinematográficos para la producción, pero solo los tres ‘hero cars’ siguen de una pieza”, comentaban desde Chrome Cars.
A día de hoy, sus dueños calculan que han podido doblar el precio desde que adquirieron el coche. Es una pieza de coleccionista y, de las tres que quedan en vida, es la única de la que se sabe el paradero. Se desconoce si a día de hoy el coche aún se encuentra en Alemania, pero en la página web de la empresa sigue apareciendo, aunque no a la venta. Para sorpresa de muchos, tiene cerca de 120.000 km, ya que sus anteriores dueños lo rodaban constantemente para que no hubiese ningún problema de motor o de óxidos.
Por internet te puedes encontrar muchos “Eleanor” con precios más accesibles a los que acabamos de comentar. Tras el éxito de la película, varias empresas estadounidenses se pusieron manos a la obra para dar vida a réplicas del vehículo. También existe la opción de pedir las piezas y adaptarlo tú mismo, a priori, más asequible. Hay versiones y versiones, y no todo el mundo hace a su “Ellie” a partir de un Fastback, como el original.
Los problemas de tener un Eleanor
Visto lo visto hay que tener cuidado ya que la ex mujer de Halicki, Denise, es de armas tomar. Tiene varios casos abiertos contra gente que ha utilizado el nombre de su marca registrada, pero el más famoso, el de un youtuber. El dueño del canal B is for Build, estaba llevando a cabo la adaptación de un Mustang a un “Eleanor”, nombre que utilizó en varios vídeos para referirse al vehículo. Denise le denunció, se quedó con el coche como parte del acuerdo y le obligó a eliminar todos los videos del proyecto.
Una medida que parece excesiva y que ya se ha cobrado sus primeras víctimas, por lo que, si quieres tener un “Eleanor” en tu garaje, no lo digas muy alto.
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