Isdera 116i Autobahnkurier, pieza única

Isdera es un fabricante alemán relativamente conocido. Ahí están los Isdera Imperator e Isdera commendatore, dos bestias con mecánica Mercedes que son objeto de deseo en subastas. Coches raros, tanto por diseño como por algunas soluciones, que fueron acompañados por otros modelos como el Isdera Erator GTE (un coche muy similar al Ford GT40)  o el Isdera 116i Autobahnkurier. Dos modelos que no son muy conocidos, en especial este último, que esconden algunas cosas muy interesantes.

El primer coche fabricado por Isdera fue el Erator GTE, un coche que se inspiraba en el Ford GT40 y que fue construido por el propio Eberhard Schulz, fundador de Isdera. Sólo fabricó una unidad y la empleó como carta de presentación. El trabajo era tan bueno que le valió un puesto de trabajo en Porsche, aunque Schilz era un fanático de Mercedes y al final, aprovechando el dinero ganado en Porsche y todo lo aprendido, se puso a trabajar en su propio proyecto, Isdera (Ingenieurbüro für Styling, Desing und Racing), mostrándolo una vez terminado a los directivos de Mercedes. Ese coche acabó siendo el Isdera Imperator.

 

El Isdera Autobahnkurier 116i monta dos motores V8 procedentes de Mercedes. Ambos unidos rinden 600 CV

 

Se trata de una historia que mucha gente conoce, no en balde, el Commendatore y el Imperator son coches, como se ha dicho, bastante deseados. Piezas muy exclusivas y espectaculares, que sin embargo, se quedan eclipsadas al lado del 116i Autobahnkuier. Estamos ante un automóvil muy especial, superlativo en todos sus apartados y además, único en el mundo. Sólo existe una unidad, la cual ha estado siempre en manos de su creador, el señor Eberhard Schulz. Y sí, acoge muchos elementos “prestados” del banco de órganos de Mercedes.

No obstante, presentado en el año 2006, no se puede catalogar como clásico, aunque emplea elementos fabricados hace algunos años. Además, el punto de partida es bastante curioso: un Volkswagen Beetle, el cual fue partido a la mitad y ensanchado en consecuencia. Por otro lado, Schulz desarrollo un chasis en escalera, es decir, un chasis de largueros y travesaños, una solución que era totalmente nueva para él, pues siempre había trabajado con chasis tubulares.

La inspiración para el Isdera 116i Autobahnkuier es el Mercedes 540K, aprovechando para rendir un pequeño homenaje a su padre, quien corrió en 1936 por Alemania en los Juegos Olímpicos de Berlín (colocó un emblema olímpico dorado en el pilar A). Pero todo lo que hay debajo de tan interesante estampa merece un detenido análisis. Los faros, por ejemplo, se tomaron de un Volkswagen Polo (son un elemento realmente carísimos de homologar y no merece la pena hacer una homologación para coches de tirada muy pequeña o para unidades únicas), mientras que el eje delantero es de un Mercedes ML y el eje trasero se toma de un Mercedes W126, la segunda generación del Mercedes Clase S presentado en 1979.

Para animarlo, un total de 16 cilindros entregan 600 CV y 900 Nm de par y obtienen su maná de un depósito de 145 litros. Esos 16 cilindros proceden de dos motores V8 5.0 Mercedes, el mismo V8 que daba vida al Mercedes S500 W126 construidos entre 1979 y 1991. Ambos motores están colocados uno detrás del otro, provocando que el morro, solamente el morro, mida casi dos metros de largo. El coche, en total, tiene una longitud de 5,65 metros y una batalla de 3,61 metros. La cabina está casi sobre el eje trasero y pesa más de 2,5 toneladas.

Schulz esconde algunas cosas, como el sistema que emplea para coordinar el funcionamiento de los dos motores, pero asegura que el proyecto necesitó en total unas 20.000 horas de trabajo y que no tiene intención de vender este coche.

 

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