Son objeto de coleccionistas, pero también de aficionados que gustan de disfrutar y experimentar fuertes emociones al volante de sus coches, aunque sea a cielo abierto. McLaren acaba de dar a conocer su nuevo descapotable, el 765 LT Spider, un modelo que eleva las cotas de la marca británica en cuanto a modelos abiertos se refiere.
Exclusivo y altamente coleccionable, el nuevo 765 LT Spider se suma a la familia del 765 LT tras la presentación del cupé durante el pasado año 2020. Modelos ambos que buscan colocar al conductor en el centro mismo de la experiencia sensorial, dinámica y auditiva (más adelante explicaremos este concepto) que ponerse al volante de un 765 provoca. De la versión cupé todas las unidades de producción previstas (765) están ya agotadas. Se han vendido, aunque muchas de ellas aún no han sido entregadas a sus futuros propietarios.
Por eso, la llegada de esta nueva versión Spider, de la que también se van a producir otras 765 unidades, significa una oportunidad más para muchos aficionados de poder conseguir adquirir un exclusivo 765 LT en propiedad, aunque se trate de la versión convertible. Es un coche, según comenta la propia McLaren, “diseñado para ofrecer no sólo un rendimiento increíble, sino también los niveles más altos de participación del conductor”. Y es que McLaren no quiere defraudar. Por eso, el nuevo 765 LT Spider es el superdeportivo convertible más poderoso y potente jamás construido por los chicos de Woking.
El McLaren 765 LT Spider monta el ya conocido motor V8 Biturbo 4.0 litros de 765 CV y 800 Nm
Desarrollado conjuntamente con la versión cupé, esta variante Spider prácticamente replica todas sus ventajas y beneficios. La única gran diferencia existente entre ambas es el techo practicable del Spider. De hecho, comparten la gran mayoría de los elementos estructurales, incluido el marco del parabrisas y como la resistencia y rigidez de chasis, bastidor y estructura del 765 LT es tan elevada, prácticamente no ha sido necesario añadir nuevos refuerzos estructurales en la carrocería del Spider para mantener los límites alcanzados. De hecho, salvo los soportes estructurales en fibra de carbono insertos en la trasera (de tal manera que forman parte intrínseca del propio chasis del vehículo) para aportar mayor seguridad a los ocupantes del vehículo en caso de vuelco, son su única diferencia. Esa y, claro está, el techo retráctil (RHT) eléctrico del coche.
Elaborado íntegramente en una sola pieza de fibra de carbono, el techo retráctil es una patente exclusiva de McLaren. Su diseño es ciertamente especial, hasta el punto de que con el cerrado forma parte integral de la estructura del coche. El panel rígido superior cuenta con un marco de fibra de carbono que contribuye a crear, junto con el resto de la estructura monocasco del coche (MonoCage II-S), una carcasa íntegra de fibra de carbono entorno al habitáculo destinado a los pasajeros cuando el techo está cerrado. Gracias a que está elaborado en una única pieza y sin sello central, el panel del techo del 765 LT Spider permite mejorar el espacio disponible a bordo para los pasajeros, habilitando una mayor altura disponible para los ocupantes del mismo, al tiempo que la disposición algo más vertical de los pilares A facilitan una mejor entrada y salida del mismo. Por otra parte, el panel del techo está elaborado mediante la superposición de una triple capa con el fin de poder reducir el ruido que llega a la cabina entre el panel superior y el que configura el techo de la misma. Así, el sonido no supera los 50 dBA, ni los 60 dBA durante el proceso de enganche. Esto hace que el interior del 765 LT Spider resulte dos veces más silencioso que el del 675 LT Spider, el primer modelo convertible de las series LT de McLaren.
La capota se abre y cierra en apenas 11 segundos, incluso circulando a velocidades de hasta 50 km/h. Como curiosidad, para su accionamiento eléctrico no se recurre al tradicional mecanismo mediante bomba hidráulica que McLaren empleaba en el 675 LT Spider, sino que en esta ocasión son hasta 8 pequeños motores eléctricos los que se encargan de plegar el panel del techo (2) subir y bajar la cubierta del tonel (2), controlar las aletas dinámicas que se despliegan en los contrafuertes del “tonneau” cuando el techo está abierto (2) , el accionamiento de las ventanillas traseras (1) y el mecanismo de enganche (1). Motores que además se han optimizado todos ellos para que puedan trabajar sincronizadamente en paralelo, lo que facilita el ahorro de tiempo alcanzado en el despliegue de movimientos que poner o quitar el techo requiere.
Un último detalle de interés en lo referente al techo retráctil es el de las ventanillas traseras eléctricas, que permiten a los ocupantes del interior del coche disfrutar de la “banda sonora” del LT que emiten las cuatro bocas de salida del escape en la trasera del mismo. Este, por cierto, está elaborado íntegramente en titanio y otros materiales habituales en la Fórmula 1 (por ejemplo, la más fina fibra de vidrio que lo protege) para facilitar tanto la transmisión y disipación del calor como para ahorrar hasta un 40 por ciento con respecto al habitual escape que montaban los anteriores 675 LT.
El 765 LT Spider recibe el mismo pack aerodinámico exterior que el de la versión cupé. Se trata de una serie de elementos, todos ellos elaborados en fibra de carbono mediante sistemas altamente evolucionados para proporcionar el efecto deseado en el avance del coche. El resultado es óptimo. El 765 LT Spider genera una carga aerodinámica un 25 por ciento superior a la del 720 S Spider gracias al eficiente trabajo realizado sobre elementos como el difusor y los faldones delanteros, los faldones laterales, los paragolpes delantero y trasero y, en especial, sobre el alerón trasero activo, que ha sido especialmente calibrado para adoptar distintas posiciones en función de que el coche se desplace con el techo abierto o cerrado.
De igual modo, los amortiguadores traseros se recalibran automáticamente para tener en cuenta el aumento de peso que recae sobre el eje trasero y la zaga en función de si el coche circula con el techo abierto o cerrado. El 765 LT Spider pesa 1.388 kilos, tan solo 49 kg más que la versión coupé, pero 80 kilos menos que el 720 S Spider (1468 kg) y 100 kilos más ligero que un Ferrari 488 Pista descapotable.
Todo ello, junto con una relación peso potencia líder en su categoría (598 CV /tonelada), contribuye a que el 765 LT Spider ofrezca una dinámica muy mejorada con respecto a la de su predecesor, algo que los ingenieros de McLaren han buscado en todo momento,… y han logrado. Lo han hecho gracias al profuso trabajo realizado en el bastidor del coche, al que han incorporado una mayor anchura de vía delante (6mm más que en el 720 S Spider), cuya altura de manejo es además menor gracias también a los nuevos resortes helicoidales LT personalizados para esta versión y a al Proactive Chassis Control que gestiona la suspensión hidráulica que monta el Spider, dotada con un software de programación específico para regular su funcionamiento.
Para impulsarse, el 765 LT Spider monta el ya conocido motor V8 Biturbo 4.0 litros de 765 CV y 800 Nm que también monta la versión coupé. Un brillante propulsor que envía todo su potencial al eje trasero a través de una transmisión automática de doble embrague y siete relaciones de marcha y que hace del 765 LT Spider el LongTail más rápido de la marca (es un 15 por ciento más rápido que el 720 S). Para acelerar desde parado hasta los 100 km/h, este Spider sólo necesita 2,8 segundos, cifra que se eleva a los 7,2 segundos para alcanzar los 200 km/h. Sin duda un coche de calle realmente muy rápido, como indica el que solo precisa de 10 segundos para recorrer 400 metros sobre el asfalto.
El conductor puede ajustar las características de la transmisión y de la suspensión gracias a los distintos modos de conducción (Comfort, Sport y Track) que se ofrecen en el panel Active Dynamics original de McLaren. Además, la transmisión del 765LT aumenta el control del conductor mediante una nueva función que permite «limitar el cambio descendente». Anteriormente, la caja de cambios de cambio secuencial de 7 velocidades rechazaría un cambio de marchas si el cambio aceleraba demasiado el motor, mientras que en el nuevo LT el software de la transmisión reconoce las intenciones del conductor y facilita la reducción de marchas adecuando la velocidad de giro del motor.
Para llevar todo el potencial del motor al suelo, el McLaren 765 LT Spider monta los eficaces neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R sobre unas llantas de aleación forjadas con diseño de diez radios que se fijan mediante ajustes estándar. Tras ellas se vislumbran los muy eficaces frenos carbonocerámicos que McLaren ofrece de serie en este modelo y que pueden incluso mejorarse aprovechando que la marca británica ofrece a sus clientes montar los aún más perfeccionados frenos carbonocerámicos que monta en el McLaren Senna.
Al igual que en este mismo modelo, el interior del McLaren 765 LT Spider está igualmente inspirado directamente en los vehículos de competición de la marca, claramente orientado al conductor y plagado de fibra de carbono por doquier (hasta el piso está elaborado en este material). Los asientos, tanto el del conductor como el del acompañante son de competición y están elaborados íntegramente en fibra de carbono, lo mismo que el túnel central de transmisión o el piso. Eso sí, el carácter deportivo no evita el lujo, pues para los guarnecidos y coberturas el uso de Alcántara también es predominante.
El equipamiento interior es bastante sobrio. McLaren alude a la necesaria búsqueda de la ligereza en la construcción del coche, y por eso ofrece a los clientes que así lo quieran, sin incrementar el precio del coche, los equipos de aire acondicionado y de audio para complementarlo. Igualmente, también hay disponibles distintos elementos opcionales MSO, así como los packs MSO Clubsport Pack y MSO LT Black Pack que McLaren ofrece también en otros modelos de su gama.
El 765 LT Spider debe su nombre a la larga cola (Long Tail) que predomina su diseño y a la potencia de su motor que se refleja fielmente en su nombre. Este también hace referencia al número de unidades que McLaren tiene previsto producir del mismo. El éxito de la versión cupé, cuya producción íntegra ya ha sido completamente vendida, ha llevado a la marca a ofrecer la misma cantidad de esta versión Spider, cuya producción prevista para este 2021 ya ha sido completamente adquirida en firme, al igual que buena parte de la prevista para 2022. Tal éxito quizás sea debido a que McLaren ha puesto un precio de salida realmente competitivo para el modelo, puesto que tal parece que las 310.500 libras esterlinas que cuesta (unos 365.000 euros al cambio, aunque en España muy probablemente se comercializará por encima de los 400.000 euros) se antojan pocas ……… o también que hay mucha más gente pudiente de la que podríamos pensar.
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