Aunque su Salón del Automóvil es clave para la industria del motor mundial, Suiza no es un país que se destaque especialmente por su producción automovilística, de ahí que el anuncio de la producción de un hipercoche por parte de Morand Cars levante tanta expectación.
Morand Cars es la marca creada por dos personalidades procedentes de la alta competición automovilística, como es el caso de Eric Boullier, quien pasó en su día como director deportivo por equipos de la Fórmula 1 como Lotus y McLaren (donde coincidió con Fernando Alonso en su segunda etapa) , y por Benoit Morand , reconocido mecánico y piloto de carreras que formó su propio equipo de competición, el equipo SARD Moran, con el cual creó el primer automóvil híbrido capaz de competir y al que llevó a ser subcampeón del mundo del WEC en 2016.
Entre ambos ahora se han propuesto que Morand Cars inicie la producción de un nuevo supercoche cuya versión híbrida podría llegar al mercado a finales del presente año y a la que seguiría una variante completamente eléctrica que se comercializaría a finales de 2022, dotadas ambas de una estética muy agresiva y de las cuales únicamente se sabe que se van a producir 73 unidades cuyo precio arrancaría a partir de los 1,58 millones de euros.
El nuevo superdeportivo de Morand Cars llegará al mercado a finales de este año
Sin nombre adjudicado por el momento, el Morand ofrece como ya hemos dicho una estética marcadamente deportiva, con un frontal muy bajo y compacto, cuyos laterales están fuertemente dominados por las grandes tomas abiertas en ambos extremos para refrigerar los frenos, por encima de las cuales se dispone de unas ópticas de diseño muy vertical entre las cuales hay un capó delantero muy curvado que prácticamente cae en consonancia con el paso de ruedas delantero, dado que ambos ejes se encuentran posicionados muy en los extremos del coche.
La vista lateral del Morand está profundamente marcada por las líneas de tensión de su diseño, que van ganando altura progresivamente justo desde el final del paso de rueda delantero hasta alcanzar el trasero, y que moldean aerodinámicamente los laterales del coche. Una imagen muy marcada también por las grandes dimensiones de sus llantas, de mayor diámetro en el eje delantero que en el trasero.
Como detalles adicionales del estilo del Morand, comentar que los mas visibles son las bocas carenadas de aire abiertas tras el paso de rueda delantero y justo antes del paso de rueda trasero (este último prácticamente en el hombro del coche) para ayudar a gestionar los flujos aerodinámicos laterales. También son de destacar las cámaras de visión trasera que ocupan los espacios habituales de los retrovisores y las enormes pinzas de freno acabadas en color rojo que se perciben a través del abierto diseño de las llantas de 9 radios de fino trazado que, quizás, resulten ser lo menos llamativo del coche.
La silueta del coche cuenta con una muy pronunciada caída en dirección la zaga que arranca prácticamente desde el final del parabrisas delantero para llegar a una zaga en la que el alerón trasero pasa prácticamente inadvertido gracias a una excelente integración del mismo en el diseño del coche
En la trasera, sin duda lo que más llama la atención, sobre todo si tenemos en cuenta la inadvertida presencia del alerón trasero ya mencionada, es el enorme y desmesurado tamaño del difusor trasero que ocupa más de tres cuartas partes de la misma y cuya función sin duda es la de contribuir a facilitar la extracción de grandes volúmenes de aire procedentes de los bajos del coche.
El chasis del Morand es un monocasco de fibra de carbono, al uso de la tendencia habitual en los superdeportivos que llegan al mercado desde hace ya bastante tiempo. Sin embargo, donde sí que se muestra innovador es en la elaboración de distintos componentes de su carrocería, como son las puertas, el capó del maletero, el alerón y otros elementos que se han elaborado en Amplitex, un material compuesto también de gran ligereza, aunque algo más pesado que la fibra de carbono.
Esto mismo también se traduce a su interior, donde si bien no se han comunicado ni datos ni imágenes sobre el mismo, si que ha trascendido que los asientos y otros elementos también recurren al Amplitex para su elaboración.
Al inicio de estos comentarios sobre el Morand, comentábamos que se iban a producir dos versiones del coche, una híbrida y otra eléctrica. La híbrida, que se espera se dé a conocer definitivamente a finales de este mismo año, contará con un motor atmosférico gasolina V10 de 5.2 litros de capacidad de origen Audi que entrega 700 CV de potencia y rinde 542 Nm. El rendimiento de esta mecánica se combina con el que producen tres motores eléctricos adicionales, uno que situado entre el propulsor térmico y la caja de cambios oficia de generador y otros dos dispuestos uno en cada rueda del eje delantero.
La potencia total combinada de todos ellos aporta un total de 1.100 CV y un par (cuya cifra total conjunta no se ha comunicado) que se transfiere al suelo a través de una transmisión X-Trac manual automatizada de siete relaciones de marchas.
Esta versión híbrida cuenta con una pequeña batería de 4.5 kWh de capacidad que puede acumular en su interior carga suficiente como para que el vehículo recorra hasta 50 km en modo completamente cero emisiones, situación que puede repetir varias veces durante los trayectos gracias al motor eléctrico que funciona como generador de energía para recargar las baterías durante los mismos.
En cuanto a la versión eléctrica, por la que habrá que esperar a finales de 2022 para conocerla, los datos avanzados indican que contará con una batería de 70 kWh de capacidad de nueva generación, cuyo peso aproximado ronda los 400 kilos (incluidos tanto el cableado como los elementos de electrónica y control que la acompañan) y que cuenta con una nueva tecnología disruptiva que emplea celdas con una densidad de energía mayor que las que actualmente se utilizan en la Fórmula E (180 Wh/kg), tecnología que le permitiría contar con una tasa de carga ocho veces a su capacidad (las actuales admiten cinco). Esto facilitaría el poder efectuar recargas completas de su batería en puntos de carga de alta capacidad (350 kW) en apenas 10-12 minutos.
En cuanto a los rendimientos, tampoco han trascendido detalles por el momento, salvo el relativo a su velocidad máxima, que se ha comentado superará los 400 km/h
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