Presentada a finales de 2016, la primera generación del Audi RS 3 LMS se ha convertido por derecho propio en estos últimos años en uno de los coches más deseados por cuantos participan en las competiciones de turismos alrededor del mundo. No en vano, el deportivo modelo de la marca de los cuatro aros es con mucho el vehículo destinado a la competición con mayor volumen de producción de Audi. De su primera generación se han producido un total de 180 unidades, suficientes para ser el Audi más frecuentemente utilizado por los clientes de la marca en el mundo de la competición.
El RS 3 LMS es la nueva arma de Audi para intentar imponerse en la categoría TCR ((Touring Car Racing) de las Le Mans Series
Desde su lanzamiento hasta finales de 2020, el deportivo compacto cuatro puertas de la marca de los cuatro aros ha comparecido en las parrillas de competición en 3.105 ocasiones para disputar un total de 1.051 carreras de 38 campeonatos en África, América del Norte, Latinoamérica, Asia, Australia y Europa. Carreras en las que consiguió la victoria en el 26,5 por ciento de sus apariciones, algo más de una de cada cuatro carreras disputadas. En total, el Audi RS 3 LMS llevó a 16 pilotos a lograr un título de campeón, ganó 38 campeonatos de marcas y logró 5 victorias en su categoría en carreras de resistencia de 24 horas. En 2018 fue nombrado como el modelo TCR (Touring Car Racing) de la temporada. Al Audi RS 3 LMS es el modelo de la marca más frecuentemente usado por los clientes de todo el mundo de las carreras.
“El RS 3 LMS demuestra el compromiso de Audi por conseguir que las carreras de turismos sean rentables para nuestros clientes. Desde el lanzamiento de su primera generación en 2016, 180 unidades del modelo compiten en todo el mundo, acumulando una gran cantidad de éxitos y cientos de trofeos. Estamos convencidos del futuro global de la clase TCR y esperamos continuar ocupando una posición de liderazgo en el mercado con nuestro nuevo modelo”, comenta Chrius Reinkle, director de la división de carreras cliente de Audi Sport.
“El coche está mejor adaptado a la competición que antes —comenta Reinkle—; es más robusto y seguro. El puesto de conducción, su ergonomía, se adapta mejor al conductor, ofreciendo mejores apoyos y aportando mayor confianza. La cinemática del chasis permite ahora efectuar determinadas adaptaciones individuales de tal manera que aporte nuevas ventajas a los equipos bajo la presión del crono, por ejemplo, en las clasificaciones. Se nos han ocurrido muchas ideas que aportar a los pilotos en este sentido. Nuestro trabajo se ha orientado por completo en aportar beneficios y ventajas a nuestros clientes, ofreciéndoles un coche con un carácter aún más de competición que el anterior, gracias sobre todo a los cambios introducidos, a la nueva transmisión, al chasis avanzado y al resto de soluciones adoptadas.
Esta segunda generación del RS 3 LMS aporta novedades en todas las áreas. Los ingenieros de la marca se fijaron dos objetivos: lograr que incluso la versión de acceso, la más cercana al modelo de producción en serie, fuera incluso un mejor coche de carreras, y optimizar los beneficios para el cliente en todas las áreas. El coche sigue siendo económico de comprar y mantener, ofrece mayor seguridad y con hasta 340 CV de potencia proporciona aún mayor placer de conducción.
Visualmente, esta segunda generación difiere significativamente de la anterior. Aún ensanchado a 1,95 m de ancho, sus medidas como es lógico cumplen con las definidas en el reglamento del TCR. Las nuevas extensiones que se han integrado en la carrocería lo hacen de forma aún más armoniosa y aerodinámica que antes. En el frontal, el faldón delantero ha sido objeto de especial atención por parte de los ingenieros para incorporar en él las tomas de aire de manera que contribuyan más significativamente al enfriamiento tanto del motor como de los frenos.
En la zaga, el alerón trasero aparece por primera vez suspendido más allá del final de la zaga para mejorar la aerodinámica del coche que ha sido especialmente optimizada para la participación del coche en las competiciones de TCR. Los ingenieros de la marca han calculado las dimensiones y posicionamiento de los distintos componentes aerodinámicos mediante técnicas de dinámica de fluidos computacional (CFD) o, lo que es lo mismo, reiteradas simulaciones de los distintos flujos en el ordenador, sin necesidad de tener que recurrir al uso del túnel del viento. Esto ha supuesto un importante ahorro de costes.
El Audi A3 RS 3 LMP se produce en distintas factorías, La carrocería procede de Ingolstadt, el motor 2.0 litros turbo de la planta húngara de Györ y el ensamblaje de todo ello se lleva a cabo en Martorell, en el Centro Técnico que el Grupo VW tiene allí dedicado al montaje de vehículos de competición, y donde se han agrupado todas las sinergias generadas en la construcción de sus distintos modelos de competición.
El RS 3 LMS incorpora la cuarta generación del motor cuatro cilindros gasolina 2.0 litros turbo del grupo, el EA888 con el que el grupo VAG ha reemplazado a la serie predecesora. El motor es el mismo que se monta en las distintas versiones de producción en serie del modelo que lo montan, salvo por el tratamiento de los gases de escape, cuyo sistema se ha cambiado para adaptarlo mejor al mundo de la competición. Montado transversalmente en el vano delantero, es una mecánica de cuatro válvulas por cilindro, de 1984 cm3 que entrega 340 CV a 6.250 rpm y hasta 420 Nm de par máximo a 2.500 rpm, que se transmiten al eje delantero a través de una caja de seis relaciones de marcha.
Se trata de un motor resistente, de gran fiabilidad y duración, tal y como se ha demostrado en la anterior generación del modelo sobre la cual muchas de las unidades montadas han disputado decenas de carreras funcionando durante miles de kilómetros en manos de los clientes de la marca. La gestión electrónica del mismo está encomendada, al sistema estándar de Magneti Marelli tal y como especifica el reglamento de las TCR lo que ha provocado una gran cantidad de trabajo de desarrollo para adaptar el motor Audi a los mapas de funcionamiento que exigen los distintos equipos de las competiciones.
En las TCR, buena parte del hardware de los coches está estandarizada, es decir, es igual para todos los modelos que en ella participan para garantizar una mayor homogeneidad, transparencia e igualdad entre todos ellos. Eso no impide el que Audi haya optimizado tanto la refrigeración de la mecánica, tanto mediante sistemas líquidos como de captación de aire frío. Así, los dos intercoolers de agua/aceite dispuestos horizontalmente, ahora se montan por separado en unidades independientes cuya disposición ahora está más protegida frente a los posibles impactos verticales que habitualmente se producen en las salidas de pista del coche.
Los ingenieros también han retocado la transmisión. El embrague de competición de doble disco pesa ahora 800 gramos menos gracias a la reducción de las masas de rotación en inercia. La nueva transmisión de seis relaciones de marcha accionadas de manera neumática `proporcionada por el especialista Hewland es más robusta que la anterior y admite el manejo secuencial a través de levas dispuestas tras el volante Los mecánicos de los distintos equipos pueden ajustar su funcionamiento y, si fuera preciso, cambiarla en menor tiempo gracias a las nuevas modificaciones introducidas. El diferencial de bloqueo incorpora un nuevo multidisco de fricción de doce superficies y los ejes de transmisión son ahora más resistentes, lo que favorece una mayor duración y un menor coste para los equipos.
Otro aspecto al que los ingenieros de Audi Sport han dedicado muchas horas de trabajo ha sido a la mejora de la seguridad. Así, ningún otro modelo de las TCR incluye tantos componentes opcionales como los que se pueden incorporar a bordo del Audi RS 3 LMS.
La jaula antivuelco, elaborada mediante tubos de acero de alta resistencia que, en total, suman 25,8 m de longitud, y un cinturón de seguridad de seis puntos de anclaje protegen al piloto, al igual que lo hace el robusto bacquet Audi Sport Protection Seat, asiento deportivo especial de protección que la marca de los cuatro aros ofrece exclusivamente para las TCR. Tanto su producción como la tapicería se ha elaborado especialmente para ofrecer al piloto la máxima seguridad en caso de accidente. Y, en caso de impacto lateral, el asiento desplaza hacia el centro del coche a su ocupante. Además, unas redes de seguridad envuelven los asientos (tanto el del conductor como el del acompañante) para proporcionar protección adicional al conductor. En el techo, una trampilla habilita una rápida extracción del piloto en caso de accidente, y permite fácilmente la extracción vertical del casco si fuera necesario- Igualmente, el asiento dispone de un corsé de rescate (dispositivo de extracción Kendrick) insertado verticalmente desde arriba para estabilizar y proteger la columna vertical del conductor.
Para incrementar la seguridad, además de para ahorrar peso, la luneta trasera es de policarbonato y se ofrece como elemento de serie en todas las unidades. En caso de accidente, es muy difícil que objetos extraños puedan atravesarla. Las mejoras en seguridad se completan con un nuevo depósito de combustible de 100 litros de capacidad y de un sistema de extinción de incendios a bordo acorde a las normativas FIA FT3.
Para los pilotos del nuevo Audi RS 3 LMS esta nueva temporada las cosas deberían resultar más sencillas. Todos los elementos dispuestos en el interior de la cabina ahora están aún más orientado hacia él piloto para facilitarle al máximo el manejo del coche. Tras el volante, el panel de control es específico para la competición del TCR. Y en la consola central, los ergonómicos mandos de hasta doce funciones se agrupan en un teclado claramente organizado a través del cual se activa el encendido, las distintas luces, el ventilador de la cabina, la calefacción del parabrisas (opcional),… El equilibrado de frenos y la activación del sistema anti-incendios quedan igualmente al alcance de la mano en la zona inferior de la consola central.
Audi Sport está abriendo nuevos caminos al ajuste del chasis para las unidades destinadas a carreras-cliente. El eje delantero McPherson permite implementar cambios en la cinemática más rápidamente que nunca antes. Las cuñas que permiten espaciar los componentes ahora también se pueden insertar tanto en el brazo de control como en la barra de dirección en cuestión de minuto. Disponibles en cuatro anchos diferentes (de 1,2 a 10mm en la horquilla) se pueden combinar de manera que el eje delantero puede ajustar sus cambios de inclinación de 2 a 7 grados, sin necesidad de efectuar la alineación de las ruedas y mantenerse así durante el fin de semana de la carrera. Sin duda una ventaja importante a considerar cuando es preciso cambiar de manera urgente la configuración durante las calificaciones para la carrera.
El eje trasero, de cuatro brazos también cuenta con varillas de empuje que permiten lograr efectos direccionales que favorecen la agilidad del coche en los giros durante la carrera. Igualmente, En apoyo de esa función y de la mayor agilidad que esta nueva edición del Audi RS 3 LMS ofrece los ingenieros de la marca de los cuatro aros han introducido otras variables en la cinemática de la suspensión para favorecer tanto el anti-dive como el anti-lift de la misma, las variaciones de altura de los centros de control del balanceo, el caster o la distancia de los bastidores auxiliares a la carrocería cuando se cambia la altura del chasis a la que se conduce el coche,…. todo un nuevo mundo de posibilidades que sin duda favorecerán un mayor rango de posibilidades para aquellos equipos que quieran configurar más a su gusto el comportamiento del compacto cuatro puertas sobre la pista.
Las estabilizadoras, dotadas de cierres rápidos por primera vez, se pueden cambiar con muy poca antelación y cuentan con hasta nueve posibles configuraciones de estabilización en el eje delantero y seis en el trasero. Variaciones que se suman a las que ofrecen tanto los resortes helicoidales como los amortiguadores , que pueden a su vez ajustarse de dos formas diferentes para completar las distintas opciones de configuración del chasis que el coche ofrece.
Todas estas innovaciones permiten al nuevo RS 3 LMS ofrecer nuevas sensaciones como coche de competición, con una variedad no vista hasta ahora.
Recibe cada semana una selección de nuestros mejores artículos suscribiéndote a nuestra newsletter.