Se tiene aceptado que el primer automóvil de la historia fue el Benz Patent Motorwagen nº3, un vehículo de tres ruedas y un motor de combustión interna de un solo cilindro que se fabricó en 1886. Es cierto que antes de este hubo varios intentos y muchos vehículos automóviles con motor eléctrico y también con motores a vapor, pero históricamente, el triciclo de Benz es el primer coche.
No obstante, no fue el primer vehículo fabricado en masa, tampoco lo fue el Ford T, que está considerado como el primer automóvil fabricado en serie y que se llegó a fabricar en España, primero en Cádiz y luego en Barcelona. El primer coche fabricado en masa es, curiosamente, otro vehículo de Benz, el Benz Motor Velocipede o simplemente, Benz Velo, puesto en circulación en 1894 y pronto convertido en un éxito de ventas al ser el primer coche pequeño y ligero con cuatro ruedas, que se adelantó a la movilidad actual sentando sus bases, o casi.
El Benz Velo fue el primer vehículo producido en masa. En ocho años se vendieron 1.200 unidades, todo un logro en aquella época
Como el Patent Motorwagen, el Benz Velo es básicamente un carruaje de caballos con un sencillo motor de un cilindro con apenas caballos y medio de potencia. Para aquellos años, suficiente para moverse por los caminos que había por calles. Caminos, por cierto, que estaban sembrados de estiércol de los caballos, un tipo de contaminación que creaba muchas infecciones y provocaba un apestoso olor en todas las ciudades. Contaminación, además, que los automóviles ayudaron a a erradicar. No hay mal que por bien no venga se suele decir.
Era el modelo más pequeño y barato que tenía la Benz & Cie. a la venta en aquel entonces, lo que permitió que muchos usuarios pudieran soñar con tener uno de estos artefactos que se movían solos para su uso personal. En aquellos años, tener un coche era algo muy especial, suponía estar a la vanguardia de la tecnología, ser una persona interesada por los nuevos inventos y un pionero, aunque mucha gente pensaba que eran aparatos del infierno y que no tendrían mucho futuro. Algo que parece inherente a cualquier nuevo invento innovador y capaz de cambiar la sociedad.
Según el propio Benz en una entrevista para “Allgemeine Automobil-Zeitung” en 1909, es casi arrancado de las manos y todo lo que se producía se vendía inmediatamente. Se vendieron 1.200 unidades entre 1894 y 1902, siendo el primer vehículo que se vendía en masa. Hoy día, con cifras de hasta 400.000 coches al año para una sola marca o cifras de 20.000 unidades al mes para un solo modelo, pensar que se vendieron sólo 1.200 coches en ocho años resulta ridículo, pero en aquel momento fue un éxito sin precedentes.
El Benz Velo, con su pequeño motor, alcanzaba los 20 km/h y podía superar pendientes del 10%. Estrenó un nuevo sistema de dirección de doble pivote desarrollado por Karl Benz y fue sufriendo diferentes mejoras a lo largo de los años, llegando a ofrecer extras como un parasol, ruedas neumáticas (más cómodas que las de caucho macizo) y hasta un motor con 4,5 CV que permitía alcanzar los 35 km/h.
La fabricación del Benz Velo finalizó en 1902 y llegaron unidades a casi toda Europa, especialmente a Alemania (lógicamente), Francia y Reino Unido.
Recibe cada semana una selección de nuestros mejores artículos suscribiéndote a nuestra newsletter.