El BMW M3 es un mito, un icono de la firma alemana que mantiene su imagen de vehículo de altas prestaciones y mucha deportividad, aunque en el fondo, poco se parece a sus orígenes. El M3 comenzó como un coche “de homologación”, un modelo destinado a cumplir con la obligación de tomar como punto de partida un vehículo de producción, impuesta por normativa. Un detalle que convirtió al Serie 3 E30 en un automóvil apasionante.
Hoy día, el M3 es un sedán de gran tamaño y con un peso, quizá, demasiado elevado, aunque también es cierto que su motor supera los 500 CV y diluye cualquier exceso de kilos que pueda tener. El caso es que aquel origen relacionado con las carreras desapareció y aunque todavía mantiene su imagen de coche superdeportivo, su auténtica esencia quedó muy atrás.
Eso, entre otras cosas, provoca que muchos expertos y aficionados fijen su mirada en generaciones anteriores, concretamente, en las tres primeras: los E30, E36 y E46. Aquella ediciones del BMW M3 fueron, para muchos, las culpables de que actualmente, el coche tenga esa imagen espectacular y solo nombran su denominación, haga que todo el mundo suspire.
No obstante, aquellas generaciones no era, ni de lejos, tan potentes y rápidas como las más recientes, aunque también es cierto que eran más ligeros y además, ofrecían mayores sensaciones al volante. O eso, al menos, es lo que afirman sus defensores. Pero no vale cualquier BMW M3 de las primeras generaciones, como en todo, hay clases. Por desgracia, el BMW M3 es un coche altamente deseado y con el tiempo, su bajada de precios ha permitido que muchas unidades caigan en malas manos, lo que complica encontrar ejemplares realmente interesantes, y además cuando lo haces, los precios son muy altos.
Casos como los que nos mostró hace no mucho el especialista estadounidense DriverSource, pues contaba con tres ejemplares en un estado espectacular a la venta, con precios igual de espectaculares. Por ejemplo, contaba con un BMW M3 Evolution II, el cual, de origen francés, se vendió rápidamente y a un precio desconocido. Igualmente, tienen un BMW M3 E36 de 1995 en un estado excepcional, cuyo precio es de 45.900 dólares –unos 42.600 euros–, junto a un BMW M3 E46 de 2002, que tienen tarifado en 64.500 dólares –59.900 euros más o menos–.
El BMW M3 Evolution II, de 1988, era la unidad 463 de las 500 fabricadas y además, era una de las 250 unidades pintadas en Azul Macao Metallic. Por su fuera poco, contaba con una inversión de más de 50.000 dólares en piezas, mantenimiento y restauración; una pieza única, sin lugar a dudas.
La unidad de la segunda generación, el M3 E36, se trata de un ejemplar estadounidense original de 1995, es decir, la segunda entrega de esta generación, equipada ya con el bloque de seis cilindros y 3,2 litros, capaz de rendir 321 CV. Se dice que esta iteración del M3 es uno de los coches deportivos de la década de los 90, una referencia que con el paso de los años, será más valorada, con lo que ello significa para los precios…
No obstante, para muchos, el BMW M3 E46 es la mejor entrega de la saga, gracias a su sensacional motor de seis cilindros en línea atmosférico de 343 CV y un sonido puramente de competición. Todavía es un modelo joven, aunque dadas sus características y su condición de coche deportivo –y firmado por BMW ///M–, el M3 E46 ha mantenido una valoración relativamente alta en el mercado. De todas formas, su aura de coche mítico también ha provocado que hay quien se ha atrevido a comprar una unidad, para luego darse cuenta de que no puede mantenerlo y ha vuelto a cambiar de manos en condiciones muy lejos de ser las mejores.
Estas tres unidades son, simplemente, un ejemplo de lo que uno puede encontrar si navega por la red en busca de un buen BMW M3. La cuestión es que los precios de las mejores unidades están lejos ser accesibles, y cada día que pasa, subirán todavía más. Pero si tienes el dinero, solo habría que decidir si comprar un BMW M3 E30, un M3 E36 o un M3 E46. ¿Vosotros con cuál os quedáis?
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