Hará historia. El Campeonato del Mundo de Fórmula 1 2020 hará historia. Si, al menos inicialmente, tan sólo iba a resultar una extensión del Campeonato del 2019 a la espera de la introducción de la nueva normativa en 2021, la crisis motivada por el Covid-19 hará de la nueva edición del certamen que comienza este próximo viernes con los primeros entrenamientos del GP de Austria una temporada histórica…… aunque se trate de una edición “express”, recortada a la disputa de tan sólo 8 Grandes Premios.
Como diría el bueno de Gonzalo Serrano, “si parpadeas, te lo vas a perder”. Son sólo 8 grandes premios (al menos de momento) agrupados en un calendario “europeo” que se disputará en los meses de julio, agosto y septiembre en solución de continuidad, un fin de semana tras otro y sin descansos ni apenas traslados, pues en dos ocasiones (Spielberg y Silverstone) se repiten trazados en fines de semana consecutivos para evitar desplazamientos y traslados.
Este mismo jueves día 2 de julio, a las 15:00 horas, con la rueda de prensa de los pilotos arranca un año más la emoción de la F1. Lo que inicialmente iba a ser el calendario más amplio de GPs celebrado jamás antes en una misma temporada, para la que se había incluido la disputa de 22 Grandes Premios ha quedado por el momento reducida a una campaña de tan sólo ocho GP en una teórica temporada europea a celebrar durante el verano, que podrá ser complementada, en función del desarrollo de la pandemia por otra minitemporada asiático-americana a celebrar durante el otoño, aunque por el momento esta última está a falta de confirmación por parte de la organización del campeonato.
Red Bull Ring será el circuito encargado de abrir la temporada 2020
Un campeonato que además de por su calendario también va a ser muy distinto en cuanto a la celebración de las pruebas, puesto que el Grupo Liberty ha dispuesto un protocolo de actuación durante la celebración de los GPs que va a provocar que lo que veamos a partir de este fin de semana sea muy diferente a lo que conocíamos anteriormente.
Los GP del tramo Europeo de esta 70ª temporada del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 mantendrán los horarios habituales y repetirán el mismo programa que habitualmente se realiza, al menos en lo referente a los entrenamientos, clasificación y carrera, puesto que los actos y eventos habituales que se celebran durante los mismos han sido cancelados como medida de protección ante el COVID-19.
La temporada promete ser extraña. Los equipos apenas han probado los cambios y mejoras introducidos en sus vehículos y tendrán que ir haciéndolo sobre la marcha, aunque lo cierto es que pocas serán puesto que la mayoría está volcado en la preparación de sus coches para 2021.
Y, además, hay que tener en cuenta que, al igual que el resto de la población, la mayoría han cerrado sus actividades o cuando menos las han variado, como en los casos de Mercedes, Ferrari, Renault, McLaren y otros, que han dedicado buena parte de sus centros de producción a la elaboración de mascarillas o a la construcción de respiradores, equipos de protección y todo tipo de material que pudiera servir para frenar los contagios y atender a los afectados por el virus.
La gran mayoría de los pilotos han tenido que recurrir al uso de simuladores para poder entrenar durante el confinamiento y muchos de ellos han peleado duramente contra la monotonía del encierro para no perder su forma física, aunque la falta de uso de los coches y la ausencia de sensaciones frente a efectos como los que les provocan la inercia y las fuerzas G que aguantan durante las carreras habrán afectado notablemente a su físico, especialmente en zonas tan sensibles como el cuello.
El parón de la actividad llegó justo tras la celebración de las únicas jornadas de entrenamientos prevista y apenas a unos días del inicio del campeonato, situación que no sólo ha dejado las espadas en el aire, sino que además nos ha deparado nuevas sorpresas de cara a la futura temporada, al decidir algunos pilotos y equipos su futuro de cara a 2021.
Así, y aunque al menos a priori van a permanecer en sus bacquet toda esta temporada, habrá pilotos que conduzcan este año en sus actuales equipos pero que puede que lo hagan pensando ya en su futuro más inmediato. El movimiento más mediático ha sido el que se ha protagonizado tras el anuncio de la no renovación del alemán Sebastian Vettel con Ferrari. Por el momento el tetracampeón del mundo abandona Maranello sin disponer de vehículo para 2021, pues ninguna de las posibles vacantes le satisface, y Vettel busca forzar la posible salida de Bottas de Mercedes de cara a la próxima temporada para optar a su volante.
La salida del alemán ha causado un efecto catarata en el resto de escuderías. Así, otro que estará en su misma situación es el español Carlos Sainz, quien ya ha sido fichado por Ferrari para ocupar su puesto y formar equipo junto a Leclerc en 2021. Y quien sí que se ha subido rápidamente al McLaren ha sido Daniel Ricciardo, quien se ha apresurado a abandonar Renault ante la poca confianza que el aussie tiene por su proyecto de cara a los próximos años. Una falta de confianza que parece haber calado en Vettel, quien tampoco anda interesado en el hueco dejado en Renault, que por el momento únicamente tiene confirmado a Estaban Ocón para 2021.
El francés aún no ha conseguido debutar con Renault y su compañero para el próximo año sigue a estas alturas del año siendo una incognita. Aparentemente el puesto interesa y mucho a pilotos como Hulkenberg y, llegado el caso, podría también ser el sitio apropiado para Valtteri Bottas si, como cada vez aparenta más, el ruso abandona Mercedes.
Y luego está lo que ya se conoce como “el factor Alonso”. El campeón español está cada vez más tentado por volver al Gran Circo, pero tiene una cosa muy clara: no lo hará si no es a bordo de un proyecto con garantías. Alonso dijo no a McLaren tras la salida de Sainz y parece que, pese a los intentos de Abiteboul, director del equipo Renault, por incorporarle también ha rechazado —al menos de momento—volver a vestir los colores azul y amarillo de la escudería francesa. Y lo ha hecho porque ante sí tiene dos posibles oportunidades. La primera, subirse al proyecto de Aston Martin, escudería que contará con los propulsores de Mercedes para su aterrizaje en la parrilla en 2021. La segunda, optar al previsible hueco de Bottas en Mercedes. Y para ello, una opción que cada vez suena más en los círculos de la F1 es la posibilidad de que se abriera un hueco en Ferrari durante la presente temporada si los resultados de Vettel al volante de su monoplaza no convencen durante la disputa de los primeros Grandes Premios.
El ánimo del piloto alemán parece caer por momentos y su relación con el equipo italiano esta cada vez más rota. Todo ello pudiera provocar que Ferrari precisara de un piloto experimentado y buen conocedor de cómo funcionan las cosas en Maranello mucho antes de que Sainz se sentara en el sitio que tiene reservado para la próxima temporada. Y esta oportunidad sería una buena piedra de toque para que Mercedes comprobara si finalmente los años le pesan o no a Alonso, quien, además también tiene previsto esta temporada participar tanto en las 500 millas de Indianápolis el próximo 23 de Agosto y las 24 horas de Le Mans el 20 de septiembre si finalmente no se sube a un F1.
Y en toda esta tesitura el que se muestra más tranquilo que nunca ante una temporada tan convulsa como la que estamos viviendo es sin duda Hamilton, quien si nada lo remedia va camino de lograr su séptimo título de campeón del mundo e igualar al Kaiser Schumacher. Su tranquilidad ante la nueva temporada es tal que Hamilton parece más dedicado a reivindicar causas sociales que a prepararse para la temporada. Y es que consciente de su cada vez mayor repercusión mediática y de su importancia en la historia de este deporte, el inglés ha tomado parte activa en polémicas sociales como la lucha en favor de la igualdad racial y en contra de la discriminación de las personas de raza negra desatada tras el asesinato de George Floyd a manos de agentes de la policía norteamericana. Tal ha sido su presión con este tema, que tal y como comentábamos ayer Mercedes ha decidido incluso cambiar el tradicional color de sus flechas de plata por el negro en señal de apoyo y solidaridad al movimiento “Black Lives Matter”.