FIAT (Fabbrica Italiana Automobili Torino), traducido como Fábrica Italiana de Automóviles de Turín. Quizá un poco redundante por eso de “italiana” y “Turín”, pues al fin y al cabo, hablamos del mismo lugar, ¿no? El caso es que se trata de una empresa internacional, cuya importancia para la industria el notable, aunque actualmente no tenga el peso en el mercado que tuvo antaño.
La FIAT actual no es ni la sombra de lo que fue, situación, todo sea dicho, de la que ellos mismos son culpables. La historia nos muestra que durante mucho tiempo, FIAT fue uno de los referentes en la industria y que sus creaciones, sus coches, estaban entre los más respetados, los más vendidos e incluso entre los más deportivos. La sangre italiana les ha llevado a crear vehículos utilitario –FIAT es uno de los mayores especialistas en coches utilitarios– con cierto talante guerrero, pero también se han atrevido a poner auténticos modelos lúdicos y pasionales.
Si hubiera que elegir uno de esos coches, uno de los pasionales, de aquellos automóviles creados con el principal objetivo de disfrutar, sin lugar a dudas nos quedaríamos con el FIAT 124 Spider. Cuando apareció este coche, la compañía italiana se encontraba entre las más punteras del mundo del automóvil, tanto a nivel técnico como en apartado de diseño y, por supuesto, en cuanto a ventas. Sin embargo, había un segmento en el que no estaban presentes y por aquel entonces, había cogido cierta importancia de cara a la imagen del fabricante.
Nos referimos al segmento de los roadster, una parcela de mercado dominada durante décadas por los británicos, con algunos escarceos de otras marcas como Mercedes con los 190SL o Alfa Romeo con los bellos Giulietta Spider. FIAT, siempre ambiciosa en aquellos tiempos, quería su trozo de pastel y contaba con las capacidades para llevarse un trozo bien grande. Además, Estados Unidos siempre fue un mercado interesante para los fabricantes europeos, donde podían vender sus coches más especiales con pingües beneficios.
Así, aprovecharon la base del FIAT 124 y comenzaron a desarrollar un roadster desde ahí. De entrada, se acortó la batalla en 14 centímetros y se encargó a Pininfarina un diseño específico, que serviría para vestir la plataforma, el conjunto motor-transmisión y las suspensiones del FIAT 124. El resultado se presentó en el salón de Turín de 1966 y aguantó en producción hasta 1985 con ligeros retoques aquí y allá, demostrando que Pininfarina hizo un trabajo soberbio.
La primera entrega del FIAT 124 Spider escondía el propulsor de 1.438 centímetros cúbicos y una caja de cambios de cinco relaciones, el cual, se sustituyó en 1969 por un bloque de 1.608 centímetros cúbicos y se acompañó con algunos cambios en la carrocería. Fue solo el comienzo, pues en 1972 se montó nuevos motores, primero un 1.6 litros –1.592 centímetros cúbicos– y luego un 1.8 litros – 1.756 centímetros cúbicos–, ambos derivados del FIAT 132.
Estados Unidos se convirtió en el mercado predilecto para el FIAT 124 Spider, al copar nada menos que 170.000 unidades entre 1968 y 1985. Eso se debió, en parte, a que en 1975 se introdujo en exclusiva en Norteamérica, para cuatro años después, pasar a conocerse como FIAT Spider 2000 al recibir un bloque de 1.995 centímetros cúbicos.
Tras la aventura estadounidense, el FIAT 124 Spider regresó nuevamente a Europa en 1981 y estrenó un nuevo diseño realizado, por supuesto, por Pininfarina. Un año después, la vida del 124 Spider se lió un poco. FIAT fabricaba las últimas unidades del FIAT Spider 2000 con destino a Estados Unidos, mismo destino que tenían los Pininfarina Spider Azzurra, la versión del 124 Spider creada por Pininfarina, al tiempo que fabricaba para el Viejo Continente el Pininfarina Spider Europa. En el fondo, eran básicamente el mismo coche pero con diferencias centradas en pequeños detalles.
No podemos olvidar que a partir de 1972, el FIAT 125 Spider Abarth pasó a ser la base que emplea la firma para competición. Primero fue un Grupo 3 con 165 CV, para luego, pasar a un Grupo 4 que llegó a rendir 210 CV.
Después de muchos años, en 2015, FIAT recuperó el 124 Spider, el cual, fue un desarrollo conjunto con Mazda, de donde también salió el Mazda MX-5 y el Abarth 124 Spider. El FIAT 124 Spider y el Abarth 124 Spider dejaron el mercado hace tiempo y tan solo ha quedado el Miata.
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