A medida que se acerca la fecha de su lanzamiento definitivo aumenta el interés y la expectación por el Jesko, el nuevo modelo mega deportivo que el especialista Koënigsegg viene desarrollando desde 2019 y del cual promete va a ser su modelo más rápido.
Fundada en 1994 por Christian von Koënigsegg, la marca sueca de modelos híperdeportivo de máximo rendimiento sigue con el mismo objetivo entre ceja y ceja: superar los 500 km/h. Y a ello a puesto manos a la obra a los 500 empleados que tiene en su sede en Ängelholm, al sur de Suecia. Allí todos sus ingenieros, técnicos y diseñadores se afanan por desarrollar una nueva obra cumbre en materia de ingeniería y producción de hiper coches con el fin de crear la tecnología más avanzada que permita al Jesko alcanzar el objetivo fijado.
Con motivo del Salón de Ginebra de 2019, Koënigsegg Automotive AB dio a conocer la primera unidad del modelo, conocida bajo la denominación Jesko Attack, con la que ya daba muestra de sus intenciones. Atacar el máximo rendimiento y velocidad punta posible de un vehículo de producción. Para ello, aquel vehículo contaba con un agresivo y muy cuidado diseño aerodinámico en el que destacaba su imponente alerón trasero activo, toda una demostración del extraordinario esmero y dedicación que los diseñadores e ingenieros de Ängelholm han puesto en conseguir la máxima eficiencia aerodinámica posible. Todo un espectáculo cuando le vemos trabajar y contemplamos como varía sus posiciones y curvatura en función de la velocidad que desarrolle el coche o como abre y cierra su DRS cuando ello es necesario. “Pasamos miles de horas en cálculos CFD. Hemos simplificado este automóvil no solo desde una perspectiva aerodinámica y de diseño, sino también desde una perspectiva de estabilidad a alta velocidad”, comenta el piloto de pruebas de Koënigsegg, Markus Lundh.
El Jesko Attack monta un motor V8 5.0 litros que supera con creces el rendimiento de cualquier V10 o V12 ya presente en el mercado. Es el mismo que ya montaba el Agera, otra de las grandes creaciones de Koënigsegg. De cigüeñal plano y con la ayuda de dos turbocompresores su rendimiento ofrece unos nada despreciables 1.623 CV de potencia máxima y entrega 1.500 Nm de par máximo, alimentado con bioetanol E85 y girando a un máximo de 8.500 rpm.
Pero ahora las cosas han cambiado. La obsesión de Christian von Koënigsegg por la velocidad le ha conducido a este momento, en el que trata de crear una bestia capaz no sólo de superar los 500 km/h sino de alcanzar la mayor velocidad punta posible alcanzada por un coche de producción en serie. Para ello, a partir del Jesko Attack está desarrollando el Jesko Absolut. Un modelo que, según comenta el propio Christian von Koënigsegg explicando el porqué de su nombre “será ‘absolutamente más rápido que cualquier coche que nunca fabricaremos”.
Esta nueva versión del Jesko se anunció a mediados de 2020 y, desde entonces, en las instalaciones de Koënigsegg se viene trabajando en ella con un único objetivo: superar las 330 millas por hora, el equivalente a 531 km/h de velocidad punta. Esto significa no sólo superar sino ir mucho más lejos de los 455,3 km/h alcanzados oficialmente por el todavía reciente SSC Tuatara e incluso de los 490 km/h registrados oficiosamente por el Bugatti Chiron Super Sport 300+ en sus primeras pruebas. Koënigsegg sigue trabajando en ello y ahora acaba de anunciar la creación de una nueva unidad de pruebas oficial del Absolut —la que muestran las imágenes que ilustran este artículo— sobre la cual se van a llevar a cabo todos los trabajos necesarios para alcanzar tan elevados objetivos. Bautizado como Graphite Grey Absolut, como el color de su acabado exterior decorado con finas líneas y detalles en color Tang Orange.
El Koënigsegg Jesko Attack monta un motor V8 5.0 litros que supera con creces el rendimiento de cualquier V10 o V12 ya presente en el mercado
El Absolut, cuyas cifras de rendimiento máximo aún están por conocerse, ha introducido variaciones en su mecánica. Así, en el motor sobrealimentado por un doble turbocompresor se ha incrementado la presión del aire hasta los 20 bar para suprimir el “lag”, ese retraso en la carga que se produce desde que pisamos el acelerador hasta que sentimos cómo funciona la inducción forzada de sobrepotencia y parece que, por fin, el motor nos hace caso proporcionándonos ese mayor rendimiento que buscamos al pisar más a fondo el pedal del acelerador. Gracias a esa mayor sobrepresión en los turbocompresores se ha logrado que la respuesta sea mucho más inmediata … y que el resultado alcanzado sea una velocidad punta superior a los 530 km/h.
Según datos facilitados por el propio Christian Von Koenigsegg en uno de los videos que acompañan estas líneas, el Jesko puede acelerar desde el ralentí hasta alcanzar los 7.800 rpm, límite marcado con el mando de la transmisión en posición Neutral (punto muerto), en apenas 213 milisegundos, lo que significa que en apenas un segundo el motor trabajaría por encima de las 31.700 rpm. Según advierte asombrado el propio Koenigsseg, sus ingenieros han llegado a medir picos superiores a las 46.000 rpm al acelerar el coche desde cotas iniciales superiores a las del ralentí. Una cifra ciertamente sorprendente que permitiría disfrutar de un mayor control del vehículo, tal y como comenta en el video: “cuanto mejor sea el número de revoluciones que se pueda obtener, mayor control podrá tener el conductor sobre el automóvil que está guiando, puesto que éste siempre tendrá una inmediata capacidad de reacción”.
Que el motor ofrezca una rápida y sorprendente respuesta cuando se usa desde bajas revoluciones, permite además disfrutar de una mayor capacidad de efectuar los cambios de marcha más rápidos. La transmisión es una automática Lightspeed de 9 marchas que permite alcanzar una velocidad máxima inaudita. “El Absolut se siente muy natural de conducir. Debido a su cambio continuo, ya sea subiendo o bajando marchas, todo sucede mucho más rápido. No hay retrasos, responde muy bien y se comporta exactamente como usted quisiera”, comenta el piloto de pruebas de Koënigsegg, Markus Lundh. Como resultado, el Jesko Absolut ofrece un extraordinario coeficiente de resistencia aerodinámica extraordinariamente reducido, de tan solo 0.278 Cd.
La transmisión secuencial Light Speed (LST) ha sido igualmente reajustada especialmente para su uso a bordo del Jesko Absolut. Ahora ofrece mayor capacidad de respuesta que la lograda nunca antes en otros modelos de la marca donde también se utiliza. Esta nueva configuración la convierte en la transmisión más rápida del mundo, permitiendo efectuar transiciones de marcha super rápidas de apenas 20 a 30 milisegundos. Esto se logra gracias a que los ingenieros del fabricante sueco han propiciado que, entre el motor y la propia transmisión, en lugar de montar un único embrague se disponga de una serie de discos de menor tamaño y masas muy reducidas que se integran en la propia caja de cambios. La caja pesa 90 kg.
El primer Jesko Absolut aún tiene mucho por contar. El Jesko Absolut Graphit Grey apenas está iniciando las primeras pruebas que habrán de ir corrigiendo y configurando su rendimiento definitivo y, poco a poco, irán trascendiendo los logros alcanzados por el mismo en esta continua carrera por alcanzar la máxima velocidad posible. Por el momento es cuanto podemos contar. Seguiremos informando.
Recibe cada semana una selección de nuestros mejores artículos suscribiéndote a nuestra newsletter.
