En marzo de 1990, hace ya 30 años, con motivo del Salón de Ginebra, se presentaba la primera unidad de uno de los súper deportivos más icónicos de la historia: el Lamborghini Diablo, un modelo cuya historia daría comienzo cinco años antes, en 1985, cuando el Proyecto 132 emprendido por los ingenieros de Sant’Agata Bolognese comenzaron a trabajar sobre el modelo que debería sustituir a otro de los grandes diseños de la marca italiana: el Lamborghini Countach.
De los pinceles de Marcello Ghandini surgirán las primeras líneas, limpias y agresivas, del futuro súper modelo. Por aquel entonces Lamborghini estaba controlada por Chrysler. El Diablo era el modelo que debía reemplazar al Countach en 1985, pero la grave situación de económica de la firma italiana, unido al proceso de fusión con Chrysler, retrasaron un proyecto que tanto los ingenieros de la marca como, al menos inicialmente, los nuevos propietarios americanos pretendían que fuera un homenaje al 25 aniversario que se celebraría en 1988. Por esa razón, en lugar del retrasado desarrollo del Diablo se lanzó al mercado la que sería la última versión del Countach, la variante 20 Aniversario y el modelo que nos ocupa fue pospuesto hasta 1989 año en el que sería presentado al público.
Pese al retraso en su comercialización —o quizás precisamente por ello— el Diablo se ganó pronto la admiración y el aprecio de los aficionados y seguidores de la marca desde el momento de su presentación. Desde ese mismo momento fue el coche de producción más rápido del mundo Alcanzaba los 325 km/h y su impresionante rendimiento dinámico cautivó velozmente al mundo del automóvil. Sin duda el intenso trabajo de desarrollo que el Campeón del Mundo de Rallyes , Sandro Munari —quién realizó en la puesta a punto del coche—, tuvo mucho que ver.
Las líneas del Lamborghini Diablo salieron de la cabeza del genial Marcello Ghandini
El Diablo ofrecía la clásica configuración de las realizaciones de la marca del toro, un motor dispuesto longitudinalmente de 12 cilindros 5.7 litros, con cuatro árboles de válvulas en cabeza y culatas de cuatro válvulas por cilindro y sistema de inyección electrónica multipunto, lo más avanzado del momento, que entregaba 485 CV de potencia máxima y 580 Nm de par máximo. Semejante potencial se transfería exclusivamente al eje trasero, lo que hacía aún más excitante y emocional la conducción del Diablo, sobre todo en las primeras unidades de producción del modelo, puesto que hasta 1993 no se incorporó ningún tipo de ayuda a la conducción, pues ni tan siquiera contaba con dirección asistida. Fue precisamente ese año cuando Lamborghini puso a la venta la primera variante del Diablo, el Diablo VT, que sería el primer Lamborghini Gran Turismo en disponer de tracción a las cuatro ruedas. Igualmente incorporaba mejoras mecánicas y cambios estilísticos que también se incorporarían a las unidades de propulsión trasera.
En 1993 también se presentó el Diablo SE30, una serie especial limitada del modelo con la que la marca del toro quería conmemorar el 30 aniversario de Lamborghini como fabricante de automóviles. Aquella edición del súper deportivo ofrecía una mayor potencia, que alcanzaba los 523 CV.
En 1995, el Salón de Ginebra fue de nuevo el escenario donde Lamborghini mostraba una nueva versión del Diablo, la SV, disponible únicamente con tracción a las ruedas traseras y con 510 CV de potencia. Por primera vez, el Diablo montaba un alerón trasero ajustable. Ese mismo año, en el Salón de Francfort se daba a conocer una nueva versión del súper deportivo, la VT Roadster, el primer Lamborghini 12 cilindros de techo abierto producido en serie. El diseño también incorporaba cambios adicionales en la estética y era un cuatro ruedas motrices.
En total fueron producidas 2.903 unidades de Lamborghini Diablo en diferentes versiones
En 1998 Audi compra Lamborghini al grupo Megatech, que apenas cuatro años tras la retirada de Chrylser en Europa sumida en una grave crisis se presentaba un nuevo restyling del Diablo SV, esta vez elaborado por Luc Donckerwolke, el primer diseñador interno de Lamborghini tras la integración de la marca en el Grupo VAG. Los cambios se incorporaron a los pocos meses en las versiones VT y VT Roadster. Tanto el exterior como el interior del Diablo fueron objeto de una amplia revisión. La mecánica también sufrió importantes modificaciones, incorporando el sistema de alzado variable de válvulas, gracias a lo cual ahora entregaba 529 CV y 605 Nm de par. Y por primera vez en un Lamborghini, los frenos se completaban con un sistema de ayuda a la frenada: el ABS, lo que muchos aficionados y medios consideraron en su momento como una importante pérdida de la esencia de los valores de la marca. Lamborghini también produjo una serie especial destinada a las competiciones GT y carreras cliente de la marca dotada con motores de 6 litros de capacidad. De esta variante se produjeron un total de
Del Diablo se produjeron en total 2.903 unidades, lo que le convirtió en el momento del cese de su fabricación en 2001 en el modelo más vendido de la marca italiana. Curiosamente, la versión original del modelo, en producción de 1990 a 1998 fue la más vendida de cuantas se lanzaron al mercado.
Unidades producidas Lamborghini Diablo
- Diablo: 1990-1998, 873
- Diablo VT: 1993-1998, 529
- Diablo SE: 1993-1994, 157
- Diablo SV: 1995-1999, 346
- Roadster del Diablo VT: 1995-1998, 468
- Diablo SVR: 1996, 34
- Diablo GTR: 1999-2000, 32
- Diablo 6.0: 2000-2001, 337
- Diablo 6.0 SE: 2001, 44
- Diablo GT: 1999-2000, 83