Recientemente se ha dado a conocer que Lancia volverá a expandirse a los mercados europeos a partir de 2024. Una importante noticia que rápidamente nos evoca a algunos de sus más importantes modelos de serie, pero también a los que fueron elaborados a partir de ellos. Este es el caso de este Lancia Hyena un modelo nacido de la genialidad de Zagato a partir del siempre atractivo y muy deseable Delta HF Integrale.
El Hyena es un modelo clásico y ultra raro que fusiona dos nombres de alta importancia en la industria automotriz italiana: Lancia y Zagato. Girardo & Co, un especialista en vehículos clásicos británico de Oxfordshire tiene a la venta una unidad de este peculiar modelo del año 1991. Una unidad que ha sido objeto de reiteradas mejoras y modificaciones a lo largo de su cuidada existencia con el fin de incrementar tanto su rendimiento como el refinamiento del vehículo
Del Lancia Hyena únicamente se llegaron a producir 24 unidades desde que en 1992 Lancia presentara en el Salón del Automóvil de Bruselas un nuevo prototipo de automóvil desarrollado conjuntamente por el restaurador, coleccionista e importador de vehículos de la marca italiana para el mercado Holandés, Pablo Koot, y por uno de los grandes estudios de diseño italianos del siglo pasado, Zagato.
El extraordinario éxito alcanzado por el Lancia Delta Integrale en sus reiteradas participaciones en el Mundial de Rallyes, provocó que numerosos aficionados quisieran contar a titulo particular con una unidad del mismo. Y de estos, algunos de ellos querían incluso contar con un modelo específico adaptado a sus gustos y necesidades, lo que dio lugar a que el Delta HF Integrale fuera uno de los vehículos que mayor atractivo tuvo en la época para los carroceros, centros de diseño y preparadores de tuning de la época.
En concreto, el Hyena nació directamente en 1990 de los pinceles y la creatividad de Marco Pedracini, diseñador de Centro de Diseño de Zagato, quien aportó su arte e ingenio para idear este curioso diseño a partir de la estructura de un Lancia Delta Integrale, cuya carrocería fue especialmente modificada para crear un hatchback de marcado estilo coupé y con tan solo dos puertas, que acentuara el deportivo estilo que el Lancia Delta y sus versiones más deportivas preconizaban.
En las instalaciones y talleres de Pablo Koot en Holanda, los modelos Delta Integrale originales se desmontaban pieza a pieza para que sus estructuras fueran envidas directamente a las del Centro de Diseño de Zagato en Milán (Italia) para crear el nuevo cuerpo que compondría la base estructural del Hyena. Como viene siendo tradición en Zagato, la ligereza y las prestaciones son la base de los modelos que salen de sus líneas de producción, y el Hyena no iba a ser una excepción.
El equipo de diseñadores de Zagato, con Marco Predacini al frente, creó una carrocería llena de gran atractivo y elegancia que rezumaba aplomo y deportividad por sus cuatro costados. Elaborado íntegramente en aluminio y con un interior en el que abundan los elementos elaborados y acabados en fibra de carbono, el Hyena apenas pesaba 1150 kg, unos 200 menos de los que sumaba el Delta HF Integrale Evo 1 de producción del que el modelo derivaba.
Para crear la nueva estructura y carrocería del Hyena, los talleres de Koot en Holanda y de Zagato en Milán (Italia) siguieron un complicado proceso de producción que, finalmente, terminaría por comprometer la economía y el resultado económico de todo el proceso. Las unidades originales del Delta HF Integrale que proporcionaban los clientes tenían que viajar directamente a los talleres de Pablo Koot en Holanda, donde se procedía al desmontaje de la carrocería e interiores del mismo, hasta dejar el coche en la estructura. Desde allí, esta era enviada a las instalaciones de Zagato en Milán, donde se procedía a efectuar las modificaciones necesarias en la estructura y a instalar las nuevas piezas de carrocería elaboradas para configurar la nueva apariencia coupé hatchback del Hyena. Modificaciones entre las cuales se incluía la nueva modificación de la culata que cubría la bancada de cilindros del bloque 2.0 turboalimentado del HF Integrale para dotarle de una nueva con flujo de gas y de un nuevo colector de escape tubular.
Un proceso que, si bien aseguraba la calidad final del producto, por contra resultaba especialmente oneroso para los clientes interesados en disponer del modelo, pues el mismo incrementaba el precio final de la transformación hasta superar los 75.000 euros, una cifra ciertamente elevada para la época y el vehículo en cuestión.
Con la adopción de la nueva carrocería, la favorable reducción del peso total del Hyena con respecto al Delta HF Integrale y la más que notable potencia máxima (250 o 300 CV, según la versión elegida por el cliente) que ofrecía su propulsor gasolina turboalimentado de cuatro cilindros en línea y 2.0 litros litros de capacidad, dotaba a las unidades producidas del Hyena con unas elevadas prestaciones en comparación con otros compactos semejantes de su época, reafirmando con ello el tremendo potencial que el Delta HF Integrales siempre mostró durante su época dorada en los rallyes del Mundial.
Así, con el motor dispuesto en posición delantera transversal y su capacidad de tracción a las cuatro ruedas, el coupé hatchback de Zagato aceleraba de 0 a 100 km/h en apenas 5,4 segundos, un registro ciertamente llamativo para la época.
Girardo & Co, especialista británico en vehículos clásicos s tiene a la venta una unidad de las 24 producidas del modelo. Concretamente se trata de la identificada con el número 002 de la serie, que fue originalmente adquirida por un banquero británico que buscaba un automóvil altamente emocional a la vez que cómodo y con el que poder viajar disfrutando plenamente de la conducción entre sus residencias en el Reino Unido y el norte de Italia. El modelo ya fue originalmente modificado por la propia marca del grupo Fiat con vistas a incrementar la potencia de su propulsor previamente a que el coche fuera entregado a Paul Kroot para iniciar su proceso de conversión y transformarlo en un Hyena.
Entre las modificaciones incluidas y con vistas a garantizar una mayor seguridad durante los largos desplazamientos que el propietario original quería efectuar, se le mejoró notablemente su capacidad de frenada para cubrir holgadamente los requisitos que su mayor rendimiento y los viajes de larga distancia. Así se instalaron discos de freno perforados de mayor tamaño al habitual, así como un tanque de combustible de mayor capacidad que el que montaba orginalmente el Delta HF Integrale. Los 90 litros que desde ese momento pueden repostarse en cada carga le otorgaban unos 724 kilómetros de autonomía.
En octubre de 2004, el Hyena 002 cambió de manos. Su nuevo dueño lo depositó en manos del especialista Mavcorse Preparazione Sportive, un preparador italiano con sede en Milán, quien introdujo algunos cambios en el diseño y terminación de la carrocería creada por Zagato y repintó su carrocería en el llamativo tono negro con terminación de doble capa (el tono original que en su día tenía el Lancia Delta HF Integrale original) que luce en las imágenes adjuntas, a la que también se añadió una tercera capa de aislamiento de Teknofibra con el fin de poder reducir en lo posible los ruidos de rodadura y procedentes de los bajos del vehículo.
Con posterioridad, en 2012, un coleccionista francés adquirió el coche. Bajo su propiedad también se introdujeron algunas modificaciones y cambios en el mismo. Así, para mejorar aún más su rendimiento, la unidad del turbocompresor fue reemplazada por una nueva, en concreto un Garret GT28, el mapa de gestión electrónica del motor remapeado en tiempo real y se dotó al motor de una nueva válvula de escape ajustable de doble pistón. Igualmente, el bastidor vio mejorada las suspensiones con la adopción de unos nuevos amortiguadores deportivos Koni Yellow.
Por último, en 2018 el coche volvió a cambiar nuevamente de manos, volviendo de nuevo al Reino Unido, donde permanece hasta el momento actual bajo su nuevo propietario, quien lo ha venido utilizando normalmente, tal y como lo hicieron en su día sus propietarios originales. Actualmente, el marcador del cuentakilómetros indica un total de 26.200 km.
Las 24 unidades producidas por Zagato del Hyena se destinaron únicamente a 8 mercados, entre los cuales no se encuentra el español, donde el vehículo de Lancia no fue distribuido por las connotaciones negativas que su nombre podría generar. Japón, a donde se destinaron 10 de las unidades producidas, fue el principal mercado receptor del modelo, seguido de Alemania con 4, Reino unido con 3, Holanda e Italia con 2 y Bélgica, Francia y Suiza con 1.
Pese a su marcado carácter y acento deportivo, el Hyena es uno de esos “lobos con piel de cordero” con los que uno se puede cruzar en la carretera. Un vehículo dotado con una brutal capacidad de transformación que le permite pasar de una conducción tranquila y relajante a otra dotada del elevado carácter emocional y rabiosamente deportivo que el Lancia Delta HF Integrale era capaz de proporcionar a cuantos se sentaban a su volante.
Un volante OMP forrado en Alcantara elaborado directamente a medida para el modelo y decorado en fibra de carbono brillante, el mismo material de la franja que rodea su acogedora cabina interior en la cual la deportividad está presente con la notable presencia de relojes e indicativos analógicos que registraban las elevadas capacidades prestacionales del Hyena que se obtenían al hacer uso del acelerador y activar el fuerte impulso que el turbocompresor y la potenciada del cuatro cilindros dos litros era capaz de proporcionar.
Y es que, pese a las notables diferencias entre ambos modelos, la ligereza alcanzada por el Hyena tras la transformación a la que Zagato sometió al Delta HF Integrale le proporcionaba una relación peso/potencia totalmente comparable a la del Porsche 91 Carrera S de la generación 991 que le catapulta de manera brillante sobre el asfalto, lo que hace del Hyena un coche realmente atractivo de conducir.
Como se desprende de la lectura de este artículo, la unidad que saldrá a subasta el próximo día XX de enero tiene su historial perfectamente documentado, hasta el punto de que incluye tanto el Certificado de origen de fábrica, la llave de repuesto, los manuales de usuario originales del modelo elaborados por Lancia, fotos de época del coche de cuando la misma se exhibió en las instalaciones de Zagato en Milán y algunas copias de revistas y periódicos en los que salieron publicados informaciones y pruebas del coche. Igualmente, se aportan numerosas de las facturas correspondientes a las modificaciones que se le han efectuado al coche desde su fabricación, así como de las labores de mantenimiento efectuadas a lo largo de todos estos años.
En suma, si buscas un coche atractivo, prestacional, marcadamente diferente y, hasta cierto punto, exclusivo con el que disfrutar conduciendo y viajando tanto en tu día a día por la ciudad (siempre que las normas anticontaminación te lo permitan) como en largos recorridos interurbanos, este Lancia Hyena puede ser el coche que andabas buscando.
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