En nuestro último Retromóvil en Madrid, se dejó ver una unidad del legendario Porsche 550 Spyder, un clásico de la firma alemana de principios de los años cincuenta. Hoy vamos a recordar el origen de este modelo, su ficha técnica, sus logros más importantes y de cómo este coche da mucho juego en la actualidad para los entusiastas de los automóviles históricos.¡
Origen
Teniendo como modelo de inspiración el pequeño Porsche 356 Speedster de 1951, la marca germana construyó el Porsche 550, convirtiéndose así en el primer automóvil de Porsche diseñado específicamente para la competición. El 550 Spyder fue presentado al público durante el Salón del Automóvil de París de 1953. A partir de ahí, el modelo fue participando en diferentes carreras de Resistencia hasta el año 1956, siendo reemplazado al año siguiente por el Porsche 718.

Diseño y datos técnicos
A la hora de diseñar el vehículo se tuvo en cuenta el hacer un modelo de baja altura, para darle así un toque más aerodinámico. Era un deportivo biplaza de tracción trasera y que era muy ligero de peso, solo 550 Kg en total.

La denominación Spyder se le vino por no disponer de ningún tipo de techo. El motor era un bóxer de cuatro cilindros de aspiración natural enfriado por aire, con una cilindrada de 1.498 cc (1,5 L), una potencia de 110 CV a 6.200 rpm, y una caja de cambios manual de cuatro velocidades.

Con estas cifras, más su aerodinámica forma, el coche podía alcanzar hasta los 220 km/h, unos números impresionantes que acabarían haciendo que el 550 Spyder dejara huella allá por donde corriera.
Éxitos deportivos
En las competiciones automovilísticas, las primeras tres unidades fueron construidas a mano y con un formato coupé con techo rígido extraíble. Uno de estos primeros chasis ganó en Nürburgring en mayo de 1953, ganando así en su carrera de debut. En ese mismo año, el 550 Spyder logró la victoria en Le Mans y en la Carrera Panamericana en su categoría correspondiente.

En 1954 Hans Hermann, piloto de Fórmula 1 con Mercedes en ese mismo año, logró la victoria en la categoría de coches inferiores a 1.500 cc en la Carrera Panamericana de México. Pero si hay que quedarse con una sola victoria del 550 Spyder, es con la de la Targa Florio de 1956. En ella, el italiano Umberto Magliogi, logró hacerse con la victoria en la categoría absoluta de la mítica prueba siciliana, siendo esta la primera victoria absoluta de Porsche en una gran prueba internacional. Con esto, se culminaba aun legado plagado de éxitos que continuo con su modelo sucesor, el 718, que llegó a puntuar en varias carreras de Fórmula 1, e incluso a conseguir varios podios.

Un coche muy reproducido y homenajeado en el presente
En su período de vida a mediados de los 50 solo fueron producidos un total de 69 unidades. Sin embargo, existen muchos más en el presente, debido a que, como pasa en otros modelos como el AC Cobra, el Jaguar C-Type o el Lotus Seven, el Porsche 550 ha sido un modelo clásico que se ha reproducido con bastante frecuencia y de una manera muy fidedigna a los originales.

Con la conmemoración del 50 aniversario del 550 Spyder en 2003, la firma lanzó una versión especial del modelo Porsche Boxster S que portó el distintivo apodo de “550 Spyder”.

La cosa no terminó ahí, y es que en las carreras de resistencia el apellido “Spyder” lo acabó portando el Porsche RS de Le Mans con el que la marca se llevó varias victorias prestigiosas, entre ellas la de las 24 horas de Le Mans de 2008 en la categoría LMP2.

El 550 Spyder se trató del primer prototipo de Porsche para la competición, dejó una huella imborrable en algunas de las carreras más icónicas en las que participó y, a día de hoy, es un gran atractivo para los salones clásicos y también para personas aficionadas que se animan incluso a recrear réplicas de este modelo tan icónico de la marca de Suttgart.





