En 1960, Mazda abrió el camino a un nuevo nicho de mercado con su R310 Coupé, un vehículo que reflejaba fielmente el estilo más puro de la automoción japonesa y que aportaba unas elevadas sensaciones de conducción, especialmente si tenemos en cuenta que sus dimensiones eran realmente muy pequeñas y que estaba concebido para satisfacer las necesidades de movilidad de los clientes más jóvenes y pudientes del mercado japonés.
El R360 era un Kei car y ello no le impidió ayudar a motorizar Japón en la década de los años 60 del pasado siglo. De él, Mazda llegó a vender 4.500 unidades, lo que le convirtió en el modelo de mayor éxito comercial de la marca hasta aquel momento. Una cifra que hoy se nos antoja muy corta, pero que en su época le permitió hacerse con nada menos que dos tercios del mercado de este tipo de vehículos en el sector oriental. Sin lugar a dudas, todo un éxito.
Del R360, Mazda únicamente llegó a ofrecer una versión mecánica en el mercado, dotada con un motor térmico de 360 cm3 de capacidad. Se trataba de una mecánica de dos cilindros en V que ofrecía una potencia máxima de 16 CV y entregaba 22 Nm de par máximo, gracias a lo cual era capaz de desplazar al coche a una velocidad máxima de hasta 90 km/h, prestaciones más que suficientes según manifestaba la propia Mazda para desplazarse en la época. Eso sí, su consumo era excesivo, incluso para su época: 32 l/100 km
La suspensión era de tipo independiente a las cuatro ruedas con resortes elásticos y barras de torsión en ambos ejes. La distancia entre ejes era de 1,76 m, pese a lo cual el interior estaba habilitado para transportar a cuatro pasajeros con comodidad.
Hay que tener en cuenta que el chasis del R360 era muy ligero, tanto por las reducidas dimensiones del coche (apenas mide 2,98 m de largo y 1,29 de ancho) como por los materiales empleados en su construcción Además de utilizar una estructura monocasco de gran simpleza, en su construcción se recurrió a montar una luneta trasera elaborada en plexiglás en lugar de cristal, aluminio en la elaboración del capó trasero donde se alojaba el motor y una aleación de magnesio ligera para construir la caja de cambios (de cuatro marchas o automática) y el carter, entre otros elementos. La “estrategia del gramo” ha estado presente en los diseños y desarrollos de la marca japonesa desde entonces con el fin de lograr ofrecer la mejor dinámica de conducción en todos sus modelos.
Con motivo del aniversario del R360, Mazda está ahora planteándose una reedición de este modelo actualizada a los nuevos tiempos para conmemorar por un lado el centenario de la marca y por otro el 60 aniversario de uno de los modelos más representativos de su historia. Para muchos, la esencia de este pequeño coupé es la que pervive en el MX5, pero desde Mazda piensan que en el nuevo escenario que la movilidad plantea de cara al futuro, una adaptación del mismo podría dar lugar a un vehículo híbrido o eléctrico que atrajera la atención de los consumidores.
La producción del R360 estuvo vigente durante 6 años, hasta 1966. De él se produjo una variante muy popular en el año 1962, el Mazda P360 o Carol que pervivió hasta 1970 y que también estuvo disponible en una versión convertible.
El Mazda R360 Coupé fue el primer turismo comercializado por Mazda. El modelo se lanzó al mercado con un precio muy competitivo, lo que permitió a muchos conductores de la época el poder acceder a la automoción y mejorar su movilidad gracias a la libertad que les aportaba el poder disponer de un coche. Podría decirse que el R360 fue uno de los modelos equivalentes en Japón al boom que representaba disponer de un 600 por las mismas fechas.
GUILLERMO LOPEZ